Febrero 2013. Hace unos días quedé para desayunar con una profesora universitaria de antropología. Había realizado una tesis doctoral y estaba interesada en editarla en nuestra colección sobre ciencias sociales. Me encantó el subtítulo de la tesis: la ilusión de crear, la ilusión de creer. Basamos parte de la conversación precisamente en eso: en lo ilusorio, en las pantallas que damos por llamar realidad, y en cómo podemos traspasarlas. Como científicos sociales, ambos creíamos fielmente en lo que alguna vez dijo Albert Einstein: “la realidad no es otra cosa que la capacidad que tienen nuestros sentidos de engañarse “. Los libros son puertas a esas otras realidades donde nuestros sentidos no alcanzan. Nos conectan con esas otras realidades que llamos por llamar fantasías o ilusión. Imaginar esos mundos posibles es albergar la esperanza de un mundo nuevo. Por eso leer es tan importante. No sólo porque nos conecta con nosotros mismos y con el mundo, sino porque nos lanzan a la conquista del nuevo mundo. Gracias un mes más por acompañarnos en la travesía.
Editorial: Séneca
Mis respetos para usted doctora Natalia. Eres un sol entre tanta obscuridad. Muchas gracias por su trabajo, gracias por despertar…